LOCKEDOOR DEJA FICCIÓN PULP:Cómo, cuándo, por qué. Entrevista a Lockedoor en exclusiva.

Cuando llegamos al Hotel Libertad Lockedoor ya nos está esperando en su suite. Tiene ordenada la habitación y las maletas al lado de la puerta. Mientras el técnico de luz nos prepara para la entrevista Lockedoor se enciende otro cigarro y suelta algún chascarrillo en un intento inútil de calmar el extraño ambiente que se respira. Lockedoor está tranquilo: insiste que le llamemos por su verdadero nombre aunque nosotros, por mantener el mito en nuestras cabezas, preferimos seguir llamándole como le conocimos siempre:

-Lockedoor, gracias por concedernos esta entrevista.

-Gracias a vosotros. Habéis estado ahí todo este tiempo, y ahora que el pueblo quiere respuestas, quién mejor que vosotros para dárselas.

(En algun lugar de la suite se escucha la canción "This is the End". Lockedoor observa el hielo de su vaso, ajeno a las emociones encontradas que produce la canción. Al entrevistador, un servidor, le resulta imposible ir al grano y decide gastar el primer cartucho con una bala ya de por sí perdida:

-Así que....¿le gusta el cine?

Lockedoor se ríe, comprendiendo mi situación de asombro ante la sombra del héroe que en su día fue. Afortunadamente, no me deja en rídiculo. Y prosigue mi burda estrategia.

-Sí, así es. Creo que el cine es mejor que la vida en muchos sentidos. El cine es sólo una pantalla blanca donde se proyectan imágenes con sonidos para que gente que se queda mirándolas durante horas. Sin embargo, tiene algo mágico, algo que hace la vida, por un instante, sea maravillosa. El cine, para mí, no es más que....

El entrevistador, un servidor, no puede contener las lágrimas más tiempo. Sus sollozos intentan ser acallados por la mano de Lockedoor en su espalda. Pero no lo consigue.
El entrevistador se mantiene así un buen rato, hasta que consigue continuar la entrevista.
(continuará)